La CNMV pone la lupa sobre los fondos
Un viejo refrán castellano dice que «el que tiene Hacienda que la atienda», y no está de más recordarlo en un momento en que algunas sentencias judiciales parecen asumir de partida que si un particular firma un contrato con una entidad bancaria, éste se halla siempre en un estado de indefensión natural. Cabe recordar que el primer responsable del cuidado de su dinero es el propio ciudadano que se lo ha ganado.
Desde hace semanas la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), que preside Elvira Rodríguez, está examinando con detalle algunas operaciones de transformación de fondos de inversión que gozaban de la condición de garantizados en nuevos fondos que ya no la tienen, pero que conservan la misma denominación. Dicha modificación se estaría haciendo informando por carta a los afectados, los cuales se sienten atraídos por la rentabilidad más elevada que ofrecen las nuevas inversiones.
La desaparición de los extratipos –depósitos con alta rentabilidad de hasta el 4% que ofrecieron durante 2012 algunas entidades financieras–, tras una instrucción emitida en diciembre por el gobernador del Banco de España, Luis María Linde, provocó una fuerte reorganización del ahorro y las inversiones de los españoles que estaban en los bancos.
El resultado es que los fondos de inversión han recibido 6.784 millones de euros en los primeros cinco meses de 2013, según datos de la patronal de fondos Inverco. Esta avalancha de dinero activó las alertas de la CNMV, donde Rodríguez ha implantado la doctrina de la «supervisión preventiva» destinada a que no se repitan casos de mala o nula información de los clientes como los sucedidos con las preferentes.
«No podemos reparar el daño, porque eso deben hacerlo los tribunales, pero sí podemos actuar preventivamente», cuenta una fuente del organismo en relación a la nueva política, de la cual Rodríguez ha dado cuenta tanto en el Congreso, donde compareció el pasado 29 de mayo, como en foros profesionales.
Es cierto que el patrimonio de los fondos de inversión, cuya rentabilidad resultó muy castigada en los primeros años de la crisis, está en niveles similares a los que presentaba a comienzos de este siglo, pero el flujo de dinero ha sido tan llamativo y potente que la CNMV ha tomado contacto con varias entidades para pedir detalles sobre cómo se están comercializando los fondos.
El dinero invertido en los fondos de inversión no cuenta con la misma garantía estatal que tienen los depósitos bancarios hasta 100.000 euros. La garantía que suelen ostentar los fondos la ofrece la entidad gestora, pero se dan casos donde la letra pequeña indica que esa garantía sólo está vigente hasta determinada fecha.
john.muller@elmundo.es